miércoles, septiembre 30, 2009

Sorpresas...

Cuando ya crees que es imposible sentir algo nuevo o distinto...
La vida te sorprende...mi vida me sorprende.

martes, septiembre 15, 2009

Diálogos

I
Transantiago


Una vibración, un tronar de dedos y abro los ojos, miro el celular… nuevamente son las 02:20 de la madrugada.

Chofer del transantiago: Guiña un ojo
Pasajera transantiago (yo): Sonrío

Chofer del transantiago: Que buena moza esta el día de hoy
Pasajera transantiago (yo): Gracias

Chofer del transantiago: Debiéramos pololear
Pasajera transantiago (yo): ¡Ya poh! ¿En qué topamos?

Chofer del transantiago: Mudo con cara de: ¿Me estai webiando?
Pasajera transantiago (yo): Con cara de: ¿De qué te quejai si voh empezaste?

De pronto un anciano tras de mí lanza: Preocúpate de manejar y deja tranquila a la Señorita, y dándome un empujoncito avanzo, marco mi tarjeta y cruzo el torniquete.


II
Taxi

Taxista: Buenas Tardes
Pasajera (yo): Buenas Tardes

Taxista: ¿A dónde?
Pasajera (yo): Siga derecho no más, porque voy tantito más allá.

Taxista: Mira con sospecha por el espejo retrovisor y me pregunta si llevo sencillo.
Pasajera (yo): Es que hoy uso zapatos que sólo son para estar sentada.

Taxista: ¿Cómo?
Pasajera (yo):Eso mismo, es que el 90% de los zapatos que uso son sólo para estar sentada, no para caminar.

Taxista: ¿Y cómo lo hace cuando quiere ir a algún lado?
Pasajera (yo): Tomo un taxi como ahora o camino

Taxista: ¿Y si tiene que caminar mucho?
Pasajera (yo): Uso zapatillas.

Taxista: ¿Y qué hace con los zapatos?
Pasajera (yo): Los llevo en una bolsa y al llegar al lugar que voy me los cambio.

Taxista: ¿Y en que trabaja?
Pasajera (yo): En una oficina


Taxista: Pasajera (yo): ¿Y entonces cuándo usa las zapatillas?
Pasajera (yo): En el trayecto de ida y vuelta a mi trabajo

Taxista: Ahhh… Pero ahora usted está con botas….
Pasajera (yo): En la esquina por favor.

Taxista: Se voltea, me mira fijamente y dice: Igual sería rico verla sacarse y ponerse las botas…


III

Habla de unas súper bacterias traga-traga y ¡zas! Aparece el recuerdo del “Molécula”. Él había obtenido su doctorado en genética molecular, por encontrarle un nueva molécula al choclo (maíz) y lo tenían empleado en la UC buscándole una molécula al choro. Aún guardo en un cuaderno los monitos que hacía para explicarme sus experimentos. También pensé en las chinitas en el espacio y obviamente en Mendel y sus arvejas, siempre pienso en Mendel. Nunca tuvimos algún intercambio proteico el Molécula y yo.

Santo Domingo. Las casas con fastuosos antejardines…las playas vacías, me bañaba con un pantalón corto rojo y una polera en la última imagen que tengo de aquel lugar. Nunca había nadie y era tan, tan pero tan divertido.

No me pereció vejatoria la intensidad de su morbo, basar la interacción en el deseo primario que finalmente nos convocaba. ¿Puede una juzgar aquellos instintos primitivos del hombre?,
¿Se puede ser tan arrogante e inseguro a la vez? . Si es un negocio, no importa mucho que no funcione, es parte de los riesgos.. y sin darme ni cuenta lo dejo ponerme contra la pared y me confieso. Y mientras lo hacía concentraba mi atención en sus manos, pensaba que remaba, también traté de dilucidar el misterio del color de los ojos, y agrupaba los detalles que de si mismo dejaba ver cuando se descuidaba.

Y me fui pensando en la física, las leyes de atracción y tensión, en la externalización o introspección… y en si era más yo…o menos yo, y a medida que avancé me tranquilice al pensar que ahora la pelota está dando botes en su área y el verá que hace con ella.

lunes, septiembre 14, 2009

Aguita con azùcar...

Siempre dicen que eso es bueno para los nervios...

Tengo la mitad de la cabeza tratando de recordar si dije lo que dije...y la otra mitad diciendo-Si dije lo que se supone que dije-: Si total no pasa' nah'.


Lo más curioso de todo es que igual me da mucha risa... y es muy bueno reirse :0)

lunes, septiembre 07, 2009

Frustración...

De no tener amigos importantes
De no ser apitutada
De tener que seguir trabajando en este puto lugar
De no cumplir con los requisitos de las postulaciones
De no poder cambiar de área, rubro, ocupación
De no poder quejarme porque con esto de la crisis la cosa esta “peluda…”
De intentar avanzar y no poder conseguirlo…
De no ser valiente y atreverme a dejar todo botado…
De escribir esto en un lugar lleno de anónimos porque no puedo decírselo a nadie en la cara...

martes, septiembre 01, 2009

Los ojos de Bette Davis…

Aún cuando intentaba no mentirle a Dios, palabras que desconocía su significado aparecían una tras otra en medio de mi discurso. Palabras descuidadas que se tropezaban a medida que salían de mi boca, algo de mí trataba de dirigirlas, pero ellas confusas pensando que era un acto de defensa el que nos convocaba, se enredaban y caían al precipicio.

Hacía ya un tiempo que no nos enfrascábamos en una conversación, y no recordaba muy bien cómo dirigirme a él, quizás por esa razón es que inicialmente mi vocabulario era algo rebuscado y lo bastante complejo para que en medio de mis intervenciones Dios solicitara un alto para consultar su diccionario. Como estábamos en son de paz, luego él me dictaba el significado de las palabras, para que yo, en mí libreta de notas, las escribiera y no las olvidara más.

-Él sabía que yo le mentía-

En estricto rigor, resultaba imposible mentirle, lo que él hacía como de costumbre era simplemente seguirme el juego y ver si había mejorado mi poder de discurso, y ver cuán fuertes seguían mis convicciones.

Trataba de guardar silencio, pero al minuto que lo hacía empezaba a adormilarme, había olvidado la sensación de somnolencia que me provocaba su divina presencia, por lo tanto todo era aún más enmarañado, primero porque si hablaba, mi lenguaje era confuso y forzado, y segundo, porque si guardaba silencio tendía a dormirme de pie.

Entre el floreado discurso, y la abominable sensación de dormirse de pie, pensé que no era después de todo una mala idea consultar nuevamente el horóscopo de la semana, a pesar de que éste seguía anunciando cosas que se negaban a llegar. La convicción de que había cosas diseñadas para mí, pero que por un error alguien más las estaba disfrutando, comenzaron a tomar fuerza y a enrarecer aún más el ambiente.

Todos estos pensamientos se agrupaban vertiginosamente en mi cerebro y tendían a confundirme, la licuadora de ideas iba triturando sin tregua cualquier cosa que llegaba a toparse con alguna de sus aspas afiladas. ¡Era Dios quien estaba parado frente a mí y yo era incapaz de hilar un discurso coherente!, el próximo paso podría ser el infierno, y aún así…, aún así era imposible…

Me acerque a la ventana y detuve unos minutos mi mirada en los edificios que se alzaban imponentes, le dije a Dios: Aguarda un momento, iré por un café. A mí regreso estaba esperándome y me invitó a tomar asiento, puse mi café sobre una mesa y hurgue en mi cartera buscando cigarros, encendí uno, aspiré profundamente, bebí un sorbo del humeante café y me puse a cantar parte de la canción qué aún recordaba:

She'll expose you
When she snows you
Off your feet with the crumbs she throws you
She's ferocious
And she knows just what it
Takes to make a pro blush
All the boys Think she's a spy,
she's got Bette Davis eyes

And she'll tease you
She'll unease you
All the better just to please you
She's precocious
And she knows just what it
Takes to make a pro blush
All the boys Think she's a spy, she's got Bette Davis eyes.

Y él solo dijo a modo de aseveración: Sí, tiene los ojos como Bette Davis…