lunes, marzo 08, 2010

Las Torres Gemelas

Durante los últimos años, lo ocurrido en Estados Unidos con las Torres Gemelas, se utilizó para ejemplificar el nivel de severidad del riesgo; ante una “Muy improbable” ocurrencia de un hecho, su nivel de impacto era “Mayor”, lo que establecía, que “de acontecer” éste quedara inserto dentro de una categoría de impacto “Catastrófico”. ¿Quién podría pensar que algo así podría ocurrir?.

En Chile en cambio la ocurrencia de sismos como que el aconteció el 27 de febrero, no es de una baja “Probabilidad de Ocurrencia”, más bien encaja perfectamente dentro de una probable ocurrencia. Frente a esos hechos, y ante la certeza de que en algún minuto, viviendo en un país sísmico, es absolutamente injustificable, que no existan los planes de contingencia adecuados para reducir los niveles de impacto que un sismo pueda provocar en el país. La existencia de protocolos con secuencias fáciles de seguir, y definiendo claramente los responsables de seguirlos, son requisitos que al parecer hemos olvidado. Este olvido nos tiene –muy probablemente- lamentando la muerte de muchos seres queridos, a los cuales de nada les sirve que se culpen unos a otros por el grado de responsabilidad que existe en el no aviso del tsunami, la tardía reacción de las autoridades, etc. Porque al parecer también han olvidado, que la responsabilidad no se delega.

Las herramientas de gestión como la elaboración de Matrices de Riesgos, o la administración en base a riesgos generalmente en las instituciones públicas, son miradas con desdén. Nadie quiere admitir, ni mucho menos “dejar por escrito”, los factores de riesgo que posee internamente. La aceptación de que existen áreas del negocio que están falentes, es un ejercicio de madurez institucional, que aún no hemos alcanzado. Si se reconoce que hay falencias o riesgos internos-externos en las labores a efectuar, es muy probable que se elaboren programas que permitan reaccionar de forma adecuada, ante acontecimientos como los ocurridos.

El factor preventivo pareciera ser una materia de la cual pocos se ocupan, la resolución de conflictos y problemáticas “inmediatas” y lo que dicta la contingencia es lo preciso de resolver, la definición sobre la marcha de los factores críticos de éxito de la organización es lo relevante, sin olvidar la presión política que puede existir en ciertas instituciones prácticamente obligadas a mostrar resultados que grafiquen en terreno la gestión del gobierno de turno, más olvidamos que la prevención y antelación debiera ser un punto fundamental en las instituciones públicas.

El control en las instituciones públicas, se ha transformado en cumplir con los Programas de Mejoramiento de la Gestión, programas que se han transformado paulatinamente en una justificación para el pago del incentivo trimestral a los funcionarios públicos, lo que ha conseguido que cada vez se establezcan metas más sencillas de cumplir, y objetivos que poca relación dicen con las labores propias que debe cumplir la institución, so-pretexto de no perder el incentivo. Y así podría sumar más portentosas herramientas que mal aplicadas, o reducidas a su mínima expresión, impiden mejorar la gestión pública.

Dudo que carezcamos como servicios públicos de las herramientas necesarias para contar con una gestión de excelencia, sólo es que nos hemos acostumbrado a cumplir por cumplir, y a pensar muy poco en lo que un trabajo mal hecho puede afectar a la ciudadanía, estamos sólo en vivir el día a día. Me pregunto en quedará la “Rendición de Cuentas” accountability, y la obligación de las autoridades de informar respecto de los responsables de la poca prolijidad en el ejercicio de sus labores de algunos funcionarios públicos o porque las instituciones simplemente no funcionaron como debían. Finalmente otra vez nos comerá la contingencia: el logro de la meta para ayudar a las víctimas, el cambio de mando, la mala memoria… Si, definitivamente mí país lamentablemente tiene muy mala memoria.

6 comentarios:

EL Mariachi dijo...

Al igual que Pedro negó tres veces a Jesús, Piñera negó tres veces a Augusto.

No todos tenemos mala memoria.

J. dijo...

Me gusta todo lo mexicano, los colores, su comida, las rancheras, el tequila. Mis mejores recuerdos de cumpleaños fueron siempre acompañados de tequila, una guitarra, mojada como diuca por tirarnos agua con la manguera y bailar más de algún “corridito”.

Buena memoria…sólo conozco gente con memoria selectiva, disosiativa, y varios tipos más terminados en “iva”. Sr. Mariachi: ¿Es usted Lukas disfrazado?

El Mariachi dijo...

Hablamos de Pedro el traidor, no de Lucas el médico el único culto entre los seguidores de Jesús, ni Lukas el dibujante, ni otros Lukas.

Hablamos de un Hitler moderno que con discursos de 3 minutos y sonrisa pulida llegará al poder mañana.

Hablamos de la falta de memoria de la humanidad y de la inservilidad de la Historia para detener a personajes como tu nuevo presidente que se yergue en la cúspide por cuatro años.

Las noticias al cielo tardan en llegar, el mesias en su cuarta venida manifestó hace una semana su parecer de la elección del traidor.

J. dijo...

:D

¿No que de los arrepentidos es el reino de los cielos?

EL Mariachi dijo...

¡Oh vosotros que habéis llegado a creer! Si os mantenéis conscientes de Dios, Él os dará un criterio por el que discernir lo verdadero de lo falso, borrará vuestras malas
acciones y os perdonará: pues Dios posee una generosidad infinita.

(Sura 8: El botín)

Tapio dijo...

Le he dado mil vueltas a esto y siempre llego a la misma conclusión. A veces solo es importante tener el control de las cosas, pero de las cosas en general. Siempre he pensado que la concertación (no solo este gobierno, el proyecto completito) no fué capaz de cumplir con todo lo que quería, pues era imposible hasta en 20 años.. imagina la cagadita que tenía en las manos. Como proyecto creo que tuvo las mejores intenciones... ahora la practica de sus integrantes.. ufff.
Es muy fácil dormirse en los laureles y preocuparse de cosas de partidos, desatendiendo el servicio público, el trabajo que realmente es importante.. el trabajo por el que estás ahí. Piñera es un demonio, tal vez el ser más macabro, sin ser el más malvado, de la derecha... pero el pueblo desmemoriado le dio el beneficio de la duda y democráticamente lo puso donde no debería estar.
Se acabó la concertación hace años, me sorprendía que antes la derecha no tuviera el control... hay que levantar un proyecto con trabajadores y gente preocupada del servicio público.. no estos personajes que tenemos que viven mejor que nosotros, nos tratan mal y nos dan sonrisitas cuando quieren que votemos por ellos. Tanto políticos de izquierda como de derecha (soy cercano a varios)... son igual de rancios... y esta masa estúpida.. seguimos votando por ellos.
Saludos y éxito en el sector privado, en u par de años volverás a parchar o a refundar lo que rompieron estos. :P

besos